Festival Cruïlla presenta la primera edición del Cruïlla Talks
11/06/2019Curtis Harding visitará Barcelona el 23 de Julio
12/06/2019La tarde del pasado sábado fue complicado acercarse en coche a Cornellà. La salida de la Ronda se hallaba colapsada por cientos de fans que querían a cualquier precio vivir el generoso directo de Alejandro Sanz.
Y es que una trayectoria de su calibre da para un amplio repertorio y sorpresas más que merecidas. Todo ello dedicado a la exclusiva masa intergeneracional de seguidores que le aman incondicionalmente.
Empezando elegantemente tarde ante los pacientes fans quiso pisar fuerte con Hoy que no estás, seguido de la rítmica presentación de Azúcar en un Bowl, tema nuevo que uno puede escuchar en #ElDisco (Universal Music, 2019) que protagoniza #LaGira. Y es que seguidamente saludó empezando bien fuerte, decidido a sacar la mejor de las sorpresas al inicio.
Shakira no resistió a los encantos del artista y el dúo levantó para alegría de la gente, entre llamas, con su tortuosa voz y baile, los primeros cantos y movimientos del público a ritmo de La Tortura.
Éxitos como Aquello que me diste, Hoy llueve, hoy duele y Capitán Tapón se intercalaron con la presentación de Te canto un Son, No tengo nada o Back in the city. Su experiencia sobradamente supo equilibrar con acierto ritmos, emociones y estilos combinados. Pasando en triángulo por las guitarras eléctrica, acústica y clásica, supo dar uso al pleno potencial instrumental y coreógrafo que lo acompañó a la cita. Estuvo a su vez cortejando con el sonido del hip-hop más moderno y el flamenco deshilado con finura por Arcángel. Se dejó acompañar durante la puesta en escena, fuese íntima o festiva, hasta el punto de ceder el foco a voces como la de Txell Sust para aplauso de su público, en su mayoría femenino.
Queremos celebrar desde Metronome guiños al pasado como pudieron ser Looking for Paradise o A la primera Persona a la vez que destacamos como el momento crucial del concierto el interrumpido por una emocionada pausa, seguida del agradecimiento y re-inicio de El Trato. Y es que el estadio se bañó en un auge de locura bárbara con miles de luces y globos blancos que los fans levantaron para tocar su fibra... y lo lograron.
Tras la conmoción que se alargó hasta la coreada Mi persona favorita, la calma se cerró con su agradecimiento a una sesión que no pudo evitar alargar más allá de las dos horas. Ya bien entrado el domingo se decidió a revisar sin pausa temas seguros como Y si fuera Ella, Amiga mía o Mi soledad y yo hasta agotar los bailes del sector femenino. El cierre definitivo se lo llevó Yo se lo que la gente piensa.
Desde aquí mandamos un fuerte abrazo a Alejandro Sanz, Artista que no deja de despertar el aprecio de aquellos críticos que tenemos el privilegio de verlo en vivo (incluyendo a los más escépticos o reservados, que caemos rendidos ante tal nivel de maestría).