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18/02/2025La noche del pasado 7 de febrero de 2025 quedará grabada en la memoria de los asistentes al Sant Jordi Club de Barcelona. Con un recinto abarrotado y una atmósfera cargada de expectación, Sidonie ofreció un concierto inolvidable, lleno de emoción y sorpresas, en el que no solo repasaron su trayectoria, sino que también marcaron el inicio de una nueva etapa musical. Desde las primeras notas, el público vibró con la energía de la banda, creando una simbiosis única entre artistas y seguidores que convirtió la noche en una auténtica celebración de la música y la amistad.
El concierto comenzó con una puntualidad británica a las 21:00 horas exactas. Desde los primeros acordes, el público se contagió de la energía del trío barcelonés, que interpretó temas de su último álbum junto con grandes éxitos de su carrera. Tras cuatro canciones, y justo después de "El peor grupo del mundo", Marc Ros tomó la palabra para presentar uno a uno a los miembros de la banda y hacer un anuncio muy especial: Sidonie lanzará un nuevo disco íntegramente en catalán. Un anuncio que fue acogido con una gran ovación por parte del público presente. Como adelanto, interpretaron "Cançons que maten", un tema que dejó entrever la esencia de este nuevo proyecto.
Uno de los momentos más íntimos de la noche llegó cuando Marc se quedó solo en el escenario con su guitarra acústica para interpretar "Giraluna", logrando una conexión mágica con el público. Pero la emoción no se detuvo ahí. Cuando terminó, Axel y Jes reaparecieron en el escenario con una sorpresa para Marc, ya que el concierto de esa noche coincidía con el día de su cumpleaños. Axel tomó el micrófono y recordó aquel día en que respondió a un anuncio que decía: "Se busca batería", destacando la importancia de su amistad y el crecimiento de la banda con las palabras: "Sidonie es una flor y nosotros tres, un jardín. Moltes felicitats, Marc". Como regalo, le entregaron un sitar indio, un gesto que emocionó al vocalista.
El concierto siguió con momentos vibrantes, como la interpretación de "Me gustas todo el rato", coreada con entusiasmo por sus seguidores. En "Verano del amor", Marc bajó por primera vez del escenario para acercarse aún más a su público, pero fue con "Un día de mierda" cuando decidió adentrarse entre ellos para cantar rodeado de sus fans, en un instante cargado de complicidad y emoción.
Antes del breve receso, la banda sorprendió con un divertido cambio de roles: Marc tomó el bajo y Jes la batería formando un dueto espectacular junto a Axel. Con una brutal interpretación instrumental, Jes dejó las baquetas y su improvisada batucada para sentarse en medio del escenario y tocar de manera magistral el sitar que previamente le habían regalado a Marc. Tras una breve pausa y una primera falsa despedida, Sidonie regresó con una explosión de energía brutal para interpretar cuatro temas más, comenzando con "Carreteras infinitas" y cerrando la noche con un apoteósico "No salgo más".
Sidonie nos ofreció una celebración de su música, su trayectoria y su amistad. Marc, Alex y Jes demostraron, una vez más, su versatilidad y pasión por la música en directo, dejando claro que su historia aún tiene muchas páginas por escribir y reafirmando su posición como una de las bandas más emblemáticas del panorama indie.