The White Buffalo rompe cuerdas en un Apolo hasta los topes

El pasado jueves, en las inmediaciones de la Sala Apolo, parecía que se estuviera realizando una reunión de fans de la serie Sons of Anarchy, pero no era así. Se trataba de la cola para asistir al concierto de Jake Smith, más conocido como The White Buffalo.

Cooncert hizo realidad las peticiones de sus fans y consiguió además que fuera un Sold Out más que merecido, ya que fue un concierto de aquellos que recordaremos toda la vida, uno de los mejores conciertos de Cowpunk de lo que llevamos de año. Tocaron en la Sala Apolo Jake Smith (guitarra y voz), Matt Lynott (batería) y Tommy Andrews (bajo).

Antes de que la banda de California saliera a escena, Xavier Calvet, acompañado de Vidal Soler, preparó al público presentando temas de ‘Firebird’ (su primer disco) en formato acústico, como ‘The Grey Lane’ o ‘Lovelight’.

Un poco pasadas las 21.15 de la noche , hacía aparición The White Buffalo, cerveza en mano. No dieron respiro a los asistentes durante los tres primeros temas: ‘Hide and Seek’ (del nuevo disco Darkest Darks, Lightest Lights, el cual venían a presentar), ‘On the distance’ y ‘Border Town’.

Hay que hacer mención especial a Matt Lynott, que además de entregarme una de sus destrozadas baquetas al final del concierto, dio un grandioso espectáculo de virtuosidad a los tambores, y lo dejó claro con ‘Stunt Driver’ y más adelante con un solo espectacular.

También hubo tiempo para tocar varias lentas como ‘The Observatory’, ‘Love Song #1’ o una de las más esperadas de la noche ‘Come Join the Murder’ (tema que sonó en el final de la serie Sons of Anarchy). Debemos informar que durante el transcurso de la canción Jake rompió una cuerda de su guitarra pero siguió tocando como si nada.

Aparte del setlist oficial, nos regalaron 3 canciones en los bises de lo más especiales, una fue ‘Wish it was True’, con Jake en solitario con su guitarra, y segunda guitarra a la que le rompió una cuerda! Menos mal que mientras tanto le arreglaron la otra acústica y pudo terminar el concierto por todo lo alto con uno de sus temas más festivos ‘How the best was won’, llevándonos a todos a esa California cien por cien country.

Al terminar el concierto, y mientras recogían el escenario, Tommy Andrews cruzó palabras con algunos de los fans de la banda llegando a entregar púas, firmar setlists o en mi caso personal, le pedí que hablara con Matt Lynott para que me regalara una de sus baquetas y así fue! Ahí es donde pude comprobar la caña que le dio a su batería, qué baqueta más destrozada!

Así terminó la primera visita de The White Buffalo en Barcelona. Aprendimos a abrir medianas con una botella de agua y nos quedó clara una cosa: en el rock’n roll, si no se suda, no es rock’n roll.

Larga vida a The White Buffalo! esperemos que vuelvan a la ciudad Condal, no nos lo perderíamos por nada del mundo!