Noche de soul: Black Pumas en el Sant Jordi Club

La noche del pasado sábado 2 de noviembre, el Sant Jordi Club vibró con la potente actuación de Black Pumas, en lo que fue una experiencia memorable para los fans de su estilo soul psicodélico. Eric Burton y Adrián Quesada deslumbraron a un público extasiado con temas de su álbum debut y de su reciente "Chronicles of a Diamond".

Black Pumas es una banda estadounidense que fusiona soul psicodélico con elementos de rock y R&B. Formada por el cantante Eric Burton y el guitarrista y productor Adrián Quesada, el grupo ha ganado reconocimiento internacional gracias a su estilo distintivo y a su exitoso álbum debut. Con influencias de la música soul de los años 70 y una vibra contemporánea, la banda ha logrado crear una propuesta fresca y profunda, destacando por su hit “Colors” y su habilidad para conectar con el público a través de su energía escénica y sus potentes letras.

Esa noche, los clásicos levantaron una ovación, y la intensidad del dúo dejó claro por qué son considerados una de las bandas más innovadoras de la escena actual. Fue una noche llena de pasión, creatividad y una energía contagiosa.

Aunque la banda se retrasó unos 15  minutos, el público eufórico recibió a Eric Burton y Adrián Quesada con una ovación. Eric, con un enérgico salto desde el escenario, sorprendió a todos al mezclarse entre la audiencia mientras cantaba “Next To You”. Continuó con “Gemini Sun”, avanzando por un pasillo que los fans abrieron con respeto, hasta detenerse para felicitar a una admiradora que celebraba su cumpleaños.

El concierto de los de Texas fue una celebración musical que recorrió lo mejor de sus dos álbumes, brindando al público una mezcla de ritmos que alternaron entre lo más sensual y lo más explosivo de su repertorio. Destacaron temas como “More Than a Love Song”, una emotiva “Tomorrow” y la intensa “OCT 33”. El clímax llegó con “Colors”, momento en el que el público conectó profundamente con Eric Burton, quien interactuó de forma breve pero significativa. Tras un solo bis con “Rock and Roll”, el show cerró con una explosión de energía psicodélica.