Nick Carter revive la nostalgia en Barcelona

El pasado 29 de julio, la Sala Apolo de Barcelona se convirtió en un auténtico santuario para los fans de Nick Carter. El miembro de los Backstreet Boys ofreció un concierto inolvidable, cargado de emoción, nostalgia y una energía desbordante que contagió al público desde el primer momento.

Con su gira "Who I Am", Carter no solo presentó sus éxitos en solitario, sino que también hizo un recorrido por su trayectoria musical, desde sus inicios en los Backstreet Boys hasta sus temas más recientes. El público coreó cada una de sus canciones, desde los clásicos de la boyband hasta los temas más actuales, como "Superman" o "Made For Us".

Pero la noche fue más allá de un simple concierto. Carter se abrió a su público, compartiendo reflexiones sobre su vida y su carrera. Recordó con cariño sus inicios en la música, influenciado por los sonidos de los 80, y cómo aquellos primeros acordes lo inspiraron a convertirse en el artista que es hoy.

"Barcelona siempre ha tenido un lugar especial en mi corazón", confesó el cantante, provocando los gritos de emoción de sus fans. "La energía que siento aquí es única". Y es que la conexión entre Carter y su público barcelonés fue palpable durante toda la noche.

El concierto fue también una especie de catarsis emocional para el cantante. En un momento de honestidad, habló de cómo la música había sido su refugio en los últimos años, reconociendo que no habría podido superar los momentos difíciles de su vida sin el apoyo incondicional de sus fans. El público respondió con una ovación ensordecedora.

Su setlist comenzó fuerte interpretando "Larger than Life” de Backstreet Boys, con la cual el público estalló en una algarabía sin igual. Continuó con versiones de “Everybody wants to rule the world” de Tears for Fears, invitando al público a cantar con él. La conexión entre Nick y su público era innegable desde el primer momento.

Luego, Nick se puso unos lentes de sol y comenzó a interpretar “Sunglasses at night” de Corey Hart y después, llegó el turno de un temón de la banda Simple Minds “Don’t you forget about me” que hizo vibrar a toda la gente más nostálgica.

Intercalaba su setlist con la interpretación de clásicos de la boyband como “Shape of my Heart”, en donde sus fans, completamente entregados, corearon la canción a todo pulmón. Tras una breve pausa, Nick reapareció en el escenario con un look más relajado, cambiando su americana rosada inicial por una cazadora tejana para conectar un poco mejor con los temas que vendrían después.

En esta segunda parte del concierto, el ex boyband comenzó a improvisar un poco más e interpretó en castellano el tema I'll Never Break Your Heart (“Nunca de Haré LLorar”) viéndose ayudado por todos sus fans que se la sabían casi de memoria. Luego continuó con un medley de “I need you tonight” y “Do I have to cry for you”.

Pero la noche no terminó ahí. Carter tenía una sorpresa guardada bajo la manga: una nueva canción que reflejaba sus luchas internas: "Superman", un himno a la perseverancia con el que se siente profundamente identificado. Para cerrar esta segunda parte interpretó una versión acústica de “Wonderwall” de Oasis. Luego de esto haría un breve descanso para cambiar de vestuario por tercera vez.

A su regreso, luciendo una chupa de cuero y una camisa a cuadros amarrada a la cintura, el cantante adoptó un look más roquero para interpretar “Wanted dead or alive” de Bon Jovi. Luego, cogió su móvil para capturar la euforia del público y hacerse un selfie con ellos. 

Vendrían a continuación versiones con un toque más roquero como “I just want you to know” y “Blow your mind”, dos clásicos de los Backstreet Boys. El medley de “Show me the meaning” y “We got it goin on” en sus versiones más rockeras desató los gritos ensordecedores de los fans que repletaban la sala Apolo.

La locura continuó con “19 in 99”  y culminó antes de los bises con una versión épica de “Quit playing games” y “Made for us”, cantadas a todo pulmón por el público, que dejó a todos con ganas de más.

Regresó al escenario con vestuario nuevo para retomar con uno de los temas más esperados por sus fans: “I want it that way”, para finalmente cerrar con el clásico de los clásicos “Backstreets backs” que electrizó a todo el público a más no poder.

Nick Carter demostró una vez más por qué sigue siendo uno de los ídolos más queridos de la música pop. Su concierto en Barcelona fue una celebración de su carrera y una noche que quedará grabada en la memoria de todos sus fans que le siguen desde sus inicios en los Backstreet Boys.